Derrumbe en Aristóbulo del Valle y San Juan: el lunes comenzará la demolición total de la propiedad
La medida fue ordenada por el juez Marcos Flores Leyes a partir del pedido que hizo el perito en la causa, el ingeniero civil Gabriel Gutiérrez. Las tareas también incluirán parte de una casa aledaña que sufrió importantes daños estructurales. Por el accidente murieron dos personas.
El próximo lunes a las 9, el personal de Defensa Civil de la Municipalidad de San Luis iniciará los trabajos para demoler lo que quedó de la vivienda ubicada en San Juan y Aristóbulo del Valle, de la ciudad de San Luis.
Este martes el derrumbe sin precedentes de una casa de dos pisos causó la muerte de Nélida Romero de Gitto, la propietaria y habitante de la planta alta, y de Javier Rodríguez, un joven de 20 años que realizaba tareas de albañilería en el local de abajo.
Tras ser designado como perito de la causa, Gabriel Gutiérrez planteó la necesidad de “hacer demoliciones urgentes”, y así lo solicitó al juez de Instrucción Penal N°1, Marcos Flores Leyes. Algunas horas después se ordenó la medida.
“Hay posterías que están totalmente fisuradas, que si llega a haber viento fuerte podría haber caídas y más daños, no hay gente viviendo, pero si llega caer en vía municipal y viene alguien caminando puede dañar”, fundamentó el profesional.
El magistrado había tenido en cuenta la importancia de conocer “la naturaleza del accidente” y a su vez “evitar mayores daños a las viviendas vecinas”.
El lunes comenzará la demolición total de la propiedad.
La demolición involucrará lo que quedó de la casa: un departamento ubicado en la parte superior, donde vivía Gonzalo Di Michele, la pareja de una Guadalupe Rivero, nieta de la mujer fallecida.
También habrá demoliciones en una casa aledaña, emplazada sobre la calle Aristóbulo del Valle al 177, que le pertenece a la familia Garro-Zavala.
El lunes comenzará la demolición total de la propiedad.
El día del trágico incidente, escucharon una especie de explosión y luego advirtieron una “nube de tierra”.
Los escombros cayeron sobre el techo del garaje y las rejas de ingreso se dañaron. Las paredes sufrieron fisuras, por eso las grietas se extienden por todo el lugar.
Ese sector de la vivienda está deshabitado y ahora deben aguardar el accionar de la Justicia. “El día del viento fuerte estábamos con el corazón en la boca”, contaron los dueños de la casa a El Chorrillero.
Los vecinos recordaron este viernes a Romero de Gitto, y detallaron que luego de que cerrara su tradicional panadería, hubo un pelotero (por unos dos años), luego funcionó una empresa que hacía viandas para fábricas y más tarde un taller de autos. Puntualizaron que siempre se hicieron refacciones al lugar.
El lunes comenzará la demolición total de la propiedad.
Unos 15 días antes del derrumbe, el negocio fue alquilado a una familia Gitana que tenía la intención de abrir una concesionaria. Por eso, cuando ocurrió el desastre estaban realizado diversos trabajos de remodelación. Uno de ellos era agrandar la entrada principal.
Luego de rescatar a las cuatro personas, las acciones en el lugar se limitaron a quitar los escombros y hacer un cierre perimetral para evitar otros accidentes.
Este viernes, el juez tenía prevista una reunión en el lugar del siniestro para ultimar detalles de la demolición que concretarán el lunes.